La distancia entre el rayo y el trueno

La distancia entre el rayo y el trueno

Sinopsis

Tu país te necesita. Tu país necesita voluntarios para vigilar que no suframos el incendio de los incendios. Los bosques están secos, tan secos, que la más mínima chispa puede llevar al país al cataclismo ecológico. Blanca, Ferran y Celi, los protagonistas de la historia, se han hecho voluntarios. Voluntarios repartidos de tres en tres en refugios vigía por todos los bosques del territorio. Para intentar salvarnos. Cabañas de vigilancia financiadas por la Unión. Los tres van a tener que tomar la decisión más dura de sus vidas en la distancia entre el rayo y el trueno.

La distancia entre el rayo y el trueno es un thriller distópico.

El espectáculo se presentó en el Teatre Tantarantana del 15 de octubre al 1 de noviembre de 2015.

Fotografías: Joel Brooks

La prensa ha dicho...

“Jumon Erra nos sitúa en un tipo de antesala apocalíptica, un paso previo a la distopía de Mad Max. Pero, a pesar del clima o gracias a la tensión que de éste se desprende, las pequeñas historias de los tres personajes y las relaciones que entre ellos se establecen cobran una excepcional dimensión. Su “heroicidad” para con sus conciudadanos esconde una huída de las propias miserias que irán apareciendo en diferentes flashbacks. La entrega a “la causa” será más bien una especie de necesidad de redención. La compañía La Danesa, en su segundo espectáculo como tal, pisa un terreno árido y difícil que nos hace transitable gracias al sentido del humor, irónico hasta el sarcasmo, con que teje las relaciones entre los personajes. Juega también a favor la codirección de la actriz Elena Fortuny y el propio autor. La sencillez escenográfica y la medida iluminación contribuyen a enaltecer lo más destacable del espectáculo: la brillante interpretación de Jordi Brunet, Eva Cartañà, Elena Fortuny y Nesa Vidaurràzaga.”
“El joven autor Jumon Erra nos ha sorprendido gratamente con esta obra.”
“Una obra que, como se dice, apunta maneras, y que recomendamos a todo aquél que desee huir de producciones más ambiciosas y disfrutar con un relato ensoñador y evocador que huye de argumentos lineales y que sugiere sin caer en la pedantería.”
“Con una buena ambientación escénica que representa el interior de la torre de vigilancia, con un aire ecológico gracias a la carpintería natural, un potente acompañamiento musical y una matizada iluminación, a ratos rojo encendido, rojo fuego, el montaje tiene la virtud de contar con cuatro intérpretes que garantizan la aportación de un plus de rigor a un guión nada fácil de ejecutar por su carácter apocalíptico”
“La trama se desarrolla entrelazando un pasado cercano con el presente, en el que se intuye el final que poco a poco se aproxima a los protagonistas. Aunque el desastre ecológico y social se palpa en el ambiente, no es éste el tema central de la obra, sino más bien una irónica reflexión sobre las relaciones, sobre las pequeñeces de las personas que, por más sobrecogedor que sea el escenario, no dejan de comportarse como si fueran niños en la guardería.”
“Un drama apocalíptico con la preocupación ecológica como marco. La obra mezcla intriga y humor con mucha maestría, y nos invita a investigar sobre qué somos capaces de hacer por el bien común. (…) Eco-arte para los más comprometidos (…)”